En una subasta danesa encontramos el siguiente cuadro erróneamente atribuido a Muñoz Degrain:
Realmente ni el estilo de la pintura ni la firma tienen que ver con Muñoz Degrain.
He aquí la firma ampliada del cuadro en cuestión:
Aparte de que dificilmente se puede leer Degrain en esta firma, tampoco corresponde a ninguna de las firmas que hemos podido ver en cuadros realmente atribuidos a Muñoz Degrain:
Antonio Muñoz Degrain (1840-1924) fue un pintor valenciano afincado en Málaga. Se presento en varias ocasiones a las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes y podemos encontrar muchos ejemplos de su obra.
Quizás su cuadro más conocido es "Chubasco en Granada" que reproducimos a continuación:
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ResponderEliminarUn alumno de don Antonio Muñoz Degrain, totalmente desconocido para quien no sea especialista en la Escuela Malagueña de pintura del Siglo XIX, fué LUIS BERROBIANCO MELENDEZ, que como don Antonio también llegó a ser profesor en la Academia de Málaga y compañero de José Ruiz Blasco, padre de Picasso.
ResponderEliminarBerrobianco, enfermo de esquizofrenia y en silla de ruedas al final de sus dias, falleció dejando a su hermana decenas de lienzos enrollados con sus pinturas, pues no había tenido dinero para enmarcarlos.
Fueron vendidos en una almoneda de calle Ollerías en la misma Ciudad, donde llamaron la atención de dos marchantes de arte parisinos.
Luis Berrobianco, cuya forma de pintar y colorido encajaban perfectamente
con la época azul de PICASSO, firmaba sus obras en el filo inferior derecho
del lienzo, por lo que era factible que éstos se recortaran evitándola y adecuando el bastidor a la nueva medida. Superponer la falsa firma con pigmentos envejecidos químicamente suponía transformar cada uno de aquellos Berrobiancos en multimillonarios PICASSOS.
Todos los cuadros, excepto dos que previamente habían sido adquiridos por coleccionistas malagueños, fueron a parar a Francia. Tenían época, el período azul de Picasso no estaba aún totalmente catalogado y la demanda
era brutal.
Colecciones y Museos galos cuelgan en sus paredes obras supuestas del genio malagueño y que en realidad fueron pintadas por el profesor amigo y compañero de su padre, que en los veranos cuando el joven Picasso venía a Málaga de vacaciones, le daba clases de colorido...
LUIS BERROBIANCO se ha quedado sin obra reconocida y su legado casi se ha perdido. Sirvan estas líneas para intentar reivindicar su memoria.